Ante los últimos atentados a los Derechos Humanos en nuestro territorio mapuche, comunicamos lo siguiente:
Ante los últimos atentados a los
Derechos Humanos en nuestro territorio mapuche,
comunicamos lo siguiente:
1. En estos días vemos las agresiones armadas
reiteradas contra la Nación Mapuche, en especial contra niños y niñas
pertenecientes a TEMUCUICUI ANCESTRAL que por décadas viene luchan por la
recuperación del emblemático Fundo LA ROMANA en la Comuna de Ercilla; la brutal
agresión e intento de asesinato del kimche chachay (sabio anciano mapuche)
Francisco Huaiquinao Haiquimil que se debate entre la vida y la muerte luego de
que la policía militar chilena lo lanzara contra el pavimento por manifestarse
junto a su comunidad en la carretera; la ocupación de la sede de UNICEF Chile
en Santiago como única via para lograr que Naciones Unidas se preocupe de la
situación y la represión sobre el Lof Trapilhue que se encuentra recuperando territorio de Quepe.
2. Hemos visto también que
una serie de ataques a campesinos pobres han sido realizados por desconocidos
(paramilitares?) para encender los ánimos de civiles organizados bajo la
conocida fórmula de las guardias civiles armadas -llamadas en este caso juntas de vigilancia-
y justificar también el estado de sitio no declarado, intensificado a partir
del 25 de julio pasado en territorio mapuche con ataques diarios, patrullaje
por aire, controles y empadronamientos en varios sectores y tecnología de
guerra como la usada por las potencias en medio oriente. Luego de esta arremetida armada se terminaron
por arte de magia los supuestos atentados, mientras los medios de comunicación
y autoridades chilenas culpan sin pruebas a mapuche de la autoría, intentando
legitimar así el control armado y la represión.
3. La violencia colonial
genera la ley y ella justifica la violencia policial y sociocultural. La
sociedad debe saber que a los jóvenes y niños de Temucuicui se les dispara a 3
metros de distancia en las puertas del Hospital de Collipulli arrojando con la
fuerza del impacto sus cuerpos a más de un metro de distancia. Varios son
heridos por la espalda lo que evidencia una vez más la alevosía del
procedimiento. En el caso del kimche Huaiquinao hay un golpe tan poderoso, que
genera una lesión que rompe las venas del cerebro y llena de sangre el espacio
entre cerebro y hueso de la cabeza. Esto genera una lesión cerebral y
eventualmente la muerte. Vemos entonces que la orden del gobierno no es
“mantener el orden” sino la ejecución de procedimientos que llevan a la muerte.
4. La valiente manifestación de
nuestras hermanas en UNICEF de Santiago convoca a todas las entidades y
personas sensibles a manifestar su opinión públicamente y busca emplazar una vez más a Naciones Unidas a
efectuar su labor de velar por el cumplimiento de los derechos que proclama. Es
sorprendente para nosotros que en el desarrollado mundo de U.N. debamos
presionar en sus oficinas para que sus funcionarios abandonen sus cómodos
sillones y seminarios inconducentes para plantear al gobierno que los valores
del derecho internacional deben ser atendidos. Por todo ello esperamos un
diálogo que responda efectivamente y sin distractores a la demanda de las
lamgen (hermanas) que se encuentran en UNICEF Santiago de Chile..
El derecho al territorio de la Nación
Mapuche es un derecho reconocido por la legislación internacional.
Marrichiweu